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Bernardo Cueva, el mexicano que va por el Mundial de Clubes

5 days ago 1

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Le susurró al oído a Enzo Maresca que lo mejor era sacar a Joao Pedro del partido. Ya había cumplido en su primer juego como titular. Maresca entonces le hizo una flexión al mexicano Bernardo Cueva para decirle que estaba de acuerdo.

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El gestor de jugadas de ataque a balón parado y ayudante de campo del técnico del Chelsea es mexicano y tiene un radar en los ojos que le permite ver lo que otros no.

De él habló en la víspera de la semifinal Maresca diciendo, "ha trabajado muy bien. Ahora tenemos alternativas para cuando se hacen jugadas de ataque a balón parado".

De los 14 goles que el Chelsea anotó hasta ahora en el Mundial de Clubes, tres fueron a pelota detenida. En este ante el Fluminense tuvieron pocas opciones, apenas cuatro tiros de esquina.

Cueva, con una tabla en mano controla todo con la mirada y por supuesto con las repeticiones en los entrenamientos. Desde el Brentford, equipo que lo llevó a Inglaterra en 2020, se encarga de diseñar los entrenamientos.

Fue campeón con las Abejas y ascendió a Primera en 2022 mientras combinaba su trabajo con la selección de Noruega. El Chelsea lo llevó en 2024 cuando Mauricio Pochettino le palomeó entre los candidatos.

La llegada de Maresca le hizo embonar en el trabajo táctico y cada vez ha ido ganando pulso. 

"Lo que no se puede medir no existe en el futbol", dice Bernardo Cueva como teoría en el futbol desde que se metió de lleno en su natal Guadalajara a ayudar a Matías Almeyda en la última etapa próspera de Chivas.

De los cuatro tiros de esquina, sólo uno terminó a puerta. Cuando Enzo Fernández levanta el brazo, quiere decir que el tiro irá a primer poste y ahí habrá que peinar a segundo palo. Casi siempre como regla, el Chelsea mete a cinco jugadores en el área.

Esa es su jugada más recurrente, pero también prueba otras como el balón más elevado y acaso, alguno en corto, con dos jugadores perfilados en la esquina. Cueva ya ubica las aptitudes y las pone a tope.

Al acabar, quedó envuelto en el abrazo grupal de 7 hombres que acompañan a Maresca. Un mexicano, como sea, ha llegado a la final del Mundial de Clubes

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